El taller busca reconstruir la continuidad de la ciudad, con la conciencia que esta se transforma en el tiempo, y que esta mutación no está sujeta a eventos distraídos y casuales que incidieron casualmente en violación de su sustancial organicidad.
Se explora la posibilidad de restituir al entorno edificado una condición de relación orgánica con las nuevas construcciones; entendiendo la organicidad, como la coherencia entre cada edificio y los edificios vecinos.
Un tejido urbano donde las intervenciones sucesivas puedan aportar un renovado devenir homogéneo entendido como derivado de un prolongado proceso de formación y transformación de la cultura material arquitectónica.