El Taller 7 República asume el reto del diseño arquitectónico en contextos urbanos de complejidad urbana con problemas diversos que exigen de parte de los alumnos capacidad de (re)imaginar las sedes de las instituciones y edificios públicos dedicados al gobierno y administración del Estado, así como el desarrollo de la sociedad civil en el país. Promovemos la idea de que la arquitectura de las sedes institucionales debe integrar a la ciudadanía, sus gobiernos y al Estado, entregando edificios públicos al espacio urbano, para crear espacios cívicos para el encuentro e identidad ciudadana.
La Región de Ancash es una importantes para el desarrollo nacional, no sólo por su ubicación geográfica y las infraestructuras portuarias e industriales, sino por la variedad de sus recursos naturales y minerales. La economía de Ancash se desarrolla a través del puerto de Chimbote, así como la explotación de sus recursos minerales, y una extensa y desarrollada red de actividades relacionadas. Sin embargo, el Gobierno Regional de Ancash, como muchos gobiernos regionales del país, en los últimos años, ha pasado por turbulencias políticas derivadas de la corrupción, abuso de poder, pésimas gestiones administrativas, y la lógica desconfianza que esto genera entre los gobernantes y la ciudadanía.
Las relaciones del edificio de la sede del Gobierno Regional con el espacio urbano reflejan la absoluta desvinculación Gobierno, Estado y sociedad: simbólica y físicamente, es un espacio opaco a la ciudadanía. El lugar en donde se ejerce el poder es inaccesible a los ciudadanos. Por ello, se hace urgente y necesario repensar la configuración y la arquitectura del Gobierno Regional de Piura para dar lugar a los ciudadanos, generando urbanidad en sus alrededores, para convertirse en un lugar de encuentro para el desarrollo de los distintos actores de la región y la sociedad se sientan y vean representados.
La propuesta para la nueva sede del Gobierno Regional de Huaraz nace de la intención de otorgar un espacio de carácter público y con diversos usos para la ciudadanía. El espacio principal del proyecto es concebido como un gran patio central protegido por una serie de voladizos y terrazas sinuosas. El proyecto busca crear un espacio de cobijo y encuentro social, recreativo y cultural en medio de la ciudad de Huaraz, ciudad en la que los espacios de sombra y reunión son apreciados por los habitantes, debido al notorio cambio de temperatura y clima propio del lugar. El edificio se emplaza en el lote de modo que el ingreso principal, el más grande y por el cual se accede al espacio cívico, tiene frente a la avenida Luzuriaga con una gran plaza principal que actúa de espacio urbano de recepción.
Mediante este principio se genera un gran espacio central, el cual es el corazón del futuro Gobierno Regional.
Este se encuentra cubierto por sombra y genera un haz de luz mediante los volados curvos. Se brinda calidez y a la vez protección. La monumentalidad acoge a todos los visitantes que se introducen a esta gran plaza cubierta que articula posteriormente con el programa del Gobierno. En ese sentido, el espacio cívico es pensado como una extensión de la calle que ingresa al edificio y cuya función principal será servir de escenario para diversos tipos de encuentros entre los ciudadanos, de modo que estos tengan lugar de representación en la ciudad.
Con respecto a la forma y organización del edificio, este se compone de cinco volúmenes que se van unificando, a través de volados y terrazas, de manera vertical. Los tres volúmenes ubicados en la parte frontal abarcarán el programa público, mientras que los dos restantes, ubicados en la parte posterior, contendrán el programa
El proyecto parte de la idea de crear una experiencia dentro de un espacio cívico, así como también otorgar a la ciudad espacios de uso colectivo que promuevan actividades sociales. Para la creación de este espacio memorable se busca generar la sensación de sorpresa mediante la monumentalidad que se logra con el cambio de escala del exterior al interior, así como también generar un espacio interior abierto.
Esta sensación de sorpresa se potencia al generar quiebres en los ingresos que no permiten ver directamente el interior, el cual se encuentra rodeado por 4 volúmenes y dejan libre un espacio central que solo es posible observar luego de atravesar el umbral.
El recorrido invita a experimentar este cambio de escala desde exterior al interior ya que el ingreso a los volúmenes solo es posible desde el espacio memorable. En el exterior la escala barrial está remarcada por |el volumen perimetral sostenido por una secuencia de columnas similar a la Av. Luzuriaga en Huaraz, mientras que la escala monumental al interior es enfatizada por las columnas de doble y triple altura que sostienen los volados de los volúmenes interiores.
El proyecto surge como una oportunidad para brindarle a Huaraz un espacio memorable dentro de un edificio de vocación pública. El diseño de este espacio parte de la idea del vacío central, que organiza perimetralmente los volúmenes y dota a este espacio de una monumentalidad que refleja el carácter institucional del edificio.
Este espacio se potencia con el desarrollo de una gran vista elevada y orientada hacia el nevado Huantsan, que también funciona como un cañón de luz. Este cañón, permite generar una atmósfera interior creada a partir del reflejo de luz sobre el piso de adoquines de ladrillo.
El espacio central es cruzado en planta baja por una alameda peatonal interior que conecta la plaza de armas con la calle Simón Bolívar y está potenciada por actividad cultural y comercial. La circulación interna se genera perimetralmente al vacío principal y se hace evidente mediante puentes peatonales que reposan sobre éste.
El diseño de la fachada busca transmitir la idea de ligereza y de transparencia, mediante el uso de paneles de enmallado de acero blanco influenciados por el color de los nevados, además se busca una porosidad hacia el exterior.