Las nuevas figuras mediáticas

Nuevos protagonistas

La convocatoria del concurso para el anteproyecto se hizo pública a inicios de abril, con un plazo de 45 días para presentarse. Para sorpresa de muchos, el equipo ganador estaba constituido por cinco arquitectos jóvenes: Carlos Arana Holder, Antenor Orrego Spelucín, Juan Torres Higueras, Luis Vásquez Pancorbo y Miguel Bao Paiba. Los tres primeros, integrantes de la empresa de diseño arquitectónico, urbanismo y construcción AOT, con cinco años de experiencia, no eran ajenos a los concursos: en 1957 habían ganado el proyecto del Club Grau de Piura. Vásquez y Bao, diez años mayores que sus colegas, tenían más experiencia en el rubro arquitectónico y varios años de labor con obras públicas.

De acuerdo con Morelli, los concursos «[…] marcaron a varias generaciones de arquitectos peruanos, puesto que ganar uno significó para muchos el inicio de su carrera profesional y para otros, el paso a convertirse en una oficina de grandes proyectos» (2019, p. 41). No obstante, el caso del aeropuerto tuvo una trascendencia singular. Los resultados aparecieron en los diarios más relevantes de la época y se comentaron durante los meses de mayo y junio de 1960. Las publicaciones no solo pusieron énfasis en la dimensión del megaproyecto y su importancia para la ciudad, sino que realzaron, por primera vez, la figura del equipo responsable. Esto sentó un precedente para la prensa peruana, que se limitaba a destacar a los responsables políticos de las obras, principalmente alcaldes o presidentes.

Las crónicas periodísticas de 1960 incluyeron fotografías de los arquitectos y extractos de entrevistas exclusivas sostenidas con ellos. Resaltaban la juventud del grupo, particularidad que no había sido impedimento para que ganaran el concurso, más aún teniendo en cuenta que ninguno de los cinco tenía experiencia en infraestructura de transporte ni había viajado en avión.

En años posteriores la atención mediática se decantó por algunos integrantes del equipo. Cuando el proyecto se retomó hacia 1963, Corpac organizó un viaje para visitar aeropuertos internacionales y aprehender las dinámicas de la aviación comercial moderna, viaje en el que participaron únicamente Arana, Orrego y Torres (AOT). En 1966, meses después de la inauguración, una crónica periodística puntualizó que «los cinco concibieron el proyecto y los tres primeros han ejecutado la obra», (Viajes, 1965, p. 2) sugiriendo una posible disociación del equipo original. Los diarios se centraron en el grupo AOT: sus menciones, fotografías, entrevistas, así como el reconocimiento de sus logros, adquirieron notable relevancia en comparación con el trato a sus colegas, a quienes presentaban como «asociados» de la empresa.

Una labor por difundir

El proyecto del nuevo aeropuerto fue un detonante para la carrera de Arana, Orrego y Torres, en cuya oficina comenzó una nueva era de grandes proyectos que duró por lo menos los siguientes 25 años. El aporte de Bao y Vásquez estaba siendo poco reconocido como parte de la historia de la arquitectura peruana y poco difundido por la prensa. Hacia 1989, con el nacimiento de una primera propuesta de ampliación del aeropuerto a cargo del grupo Arana, Bao, Torres, Vásquez (ABTV), las crónicas periodísticas dejan de lado la participación inicial del dúo de arquitectos mayores, que se tradujo posteriormente en reportes y correspondencias aclarando la conformación del equipo designado.

Frente al ya conocido trabajo y legado que la oficina Arana Orrego Torres ha plasmado en el territorio, es imprescindible destacar la labor de Luis Vásquez Pancorbo como miembro de la Junta de Obras Públicas (JOP) y la Junta Nacional de Vivienda (JNV), así como parte del equipo que ocupó el sexto lugar, entre más de 1200 equipos, para el concurso del edificio Peugeot, Argentina; así como parte del equipo proyectista de la residencial San Felipe (1969) y autor de varios clubs de Lima y alrededores. De igual manera la labor participativa de Miguel Bao Paiba en los Congresos Panamericanos de Arquitectos (FPAA), así como autor del proyecto de la Universidad Femenina del Sagrado Corazón.

Bibliografía

«“Creo que la arquitectura está en transición, en el camino de la valoración de los conceptos antiguos de la arquitectura peruana”. El Mundo entrevista a los cinco ganadores del concurso de la Corpac». El Mundo, Lima, 1960.

Morelli, Marta (2019). El proyecto público como acción política. La participación de los arquitectos en los concursos públicos de arquitectura. Revista A-Arquitectura PUCP, 13, 40-43.

«Obra millonaria: un palacio de cristal y mármol», Viajes, 14, Lima, 1965.

Torres, Gonzalo (2017). El Tao de AOT. En Universidad de Lima (ed.), Arana Orrego Torres. Historia de un emprendimiento, pp. 63-71. Fondo Editorial de la Universidad de Lima.